¿Ya hemos llegado? - RSSB Satsangs & Composiciones

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¿Ya hemos llegado?

Los viajes por carretera en los años 50 y 60 fueron a menudo momentos de gran expectación y diversión vacacional. Los planes para preparar la ropa, aperitivos y mapas para mostrar el camino se convirtieron en una fórmula mágica para asegurarse de que el viaje transcurriera sin problemas. Dependiendo de la duración del viaje y del destino siempre se respiraba un aire de ilusión para que el viaje terminara con gran felicidad y buenos momentos. Sin embargo, nunca había suficientes libros para colorear, juegos, o aperitivos para mantener a los niños entretenidos, ya que el viaje era siempre más largo de lo esperado, e inevitablemente el coro de “¿Ya hemos llegado?” –a veces acompañado de lágrimas de frustración– se convertía en la frase inicial de todas las conversaciones.

Tal vez cuando llegamos a este sendero, también tuvimos la impresión de que sería un viaje corto a la iluminación que buscábamos. Respondimos a algún tirón de nuestro interior y seguimos ese tirón hacia un destino invisible y desconocido. Cuando escuchamos por primera vez esa voz interior que nos llamaba, probablemente no teníamos ni idea de los misterios que nos esperaban. Martin Buber escribió: “Todos los viajes tienen destinos secretos de los que el viajero es inconsciente”1. Pero nuestro mapa interior, el maestro, tiene sus raíces en lo más recóndito de nuestra alma, y él ha hecho la promesa de que nos guiará en este viaje.

Farid ud-din Attar, contemporáneo de Rumi, escribió:

El Amigo decide el cuándo y el cómo.
Dondequiera que vayas, estás conmigo.
Y por cada paso hacia mí
Recorro ambos mundos para venir a ti…
Ya que separarte de mí no está en tu destino2.

La Torá (Biblia hebrea) empieza con una historia de un viaje similar al que ahora nos hemos embarcado. Es la historia de Avram y Sarai, que más tarde se conocen como Abraham y Sara. Se les pidió no solo que se fueran a una tierra nueva y desconocida sino también a cambiar a una vida completamente nueva. No tenían un mapa de carreteras, ni juegos, y probablemente no tenían aperitivos, pero lo que si tenían con ellos en su viaje era la voz de Dios, el misterio incognoscible e innombrable mas allá de nuestra comprensión. En Génesis 12:1 el Señor les habla:

Ve a ti mismo,
Deja tu tierra natal
Tu lugar de nacimiento
La casa de tus padres
(y ve) a la tierra que te mostraré.

Para este viaje, no solo se les pide que hagan un viaje hacia el exterior, sino también hacia el interior. “Ve a ti mismo”. Este es el primer mandamiento del Señor. Este viaje suyo es una llamada a la autorrealización que conduce a la realización de Dios. Es un mensaje que va dirigido a cada uno de nosotros. Lo insólito es que Abraham y Sara prestaron atención a la voz que oyeron y actuaron en consecuencia.

A nosotros también se nos ha invitado a embarcarnos en un viaje a una tierra desconocida. El viaje no es a la tierra que nos es tan conocida aquí donde hemos nacido, vivimos, nos casamos, tenemos hijos, buscamos riqueza, y nos distraemos cada vez más de nuestras prioridades espirituales; es un viaje, como describe un cabalista del siglo XVII, para “buscar y descubrir la raíz de tu alma, para que puedas cumplirla y devolverla a su fuente, su esencia”3.

En Yoga and the Bible se dice:

No hay cuestiones de mayor importancia a las que se enfrenta un ser humano que las de descubrir quién y qué es realmente, qué lugar ocupa en el universo, cuál es su relación con el Creador supremo… y qué camino debe seguir para “hacer la voluntad del Padre” y ganar… la salvación4.

Abraham y Sara comprendieron la inmensidad de este viaje, que en realidad es la alegoría del viaje de una vida centrada en el ego a una existencia centrada en Dios. En el Sefat Emet (“Lenguaje de la Verdad”) del rabino Yehuda Leib Alter del siglo XIX, dice:

Y la verdad más profunda es que debemos escuchar para recibir lo que está más allá de nuestra comprensión, es decir, el conocimiento de la naturaleza infinita de Dios. Con este fin, debemos renunciar continuamente a nuestro conocimiento conceptual: lo que entendemos solo con nuestras mentes5.

Esa clave, esa guía que hace que nuestros pasos sean robustos, es el regalo de la meditación. Por medio de la profundización de nuestro simran y bhajan y el recuerdo de él, se fortalecerá nuestra comprensión del sendero y el papel que juegan nuestros karmas en la purificación de nuestra conciencia, y experimentaremos sin lugar a dudas que él siempre ha estado con nosotros y que este viaje nos está llevando a las puertas de la eternidad.

El monje trapense estadounidense Thomas Merton sugiere:

La brillantez intelectual nunca se requiere (para la meditación)… No tiene que sentirse encendida con arrebatos de amor ardiente6.

Pero debemos hacerlo. Hazur parece hacer todo lo posible para asegurarnos que aunque el camino hacia el infinito no se nos revela inmediatamente, nuestro Padre celestial siempre cumple la promesa que hace cuando nos iniciamos, “que hemos sido elegidos para la liberación eterna”. Él dice:

Aquel que te ha creado está más pendiente de ti, te cuida mucho más y está más preocupado por ti que tú mismo… ten fe en el Padre7.

Maharaj Sawan Singh dice en Joyas espirituales:

Aquellos que permanecen fieles y continúan trabajando lo mejor que saben tienen que darse cuenta de cuán grande es el trabajo que han hecho y cuán grande es la recompensa que les espera8.

Estamos en un viaje como Abraham y Sara, con la voz de Dios, el Shabad, llamándonos continuamente. A veces con fuerza, a veces con suavidad, nuestro amado está continuamente iluminando el camino; debemos escuchar su voz e ir avanzando paso a paso.

Hazur nos anima diciendo:

Cuando el Señor te ha elegido para la liberación eterna, entonces, ¿qué otro poder puede retenerte por mucho tiempo en esta creación? Conlleva mucho tiempo, esfuerzo y perseverancia… Pero definitivamente se realizará algún día. El maestro te verá de vuelta a casa… El maestro siempre está contigo y también lo está su amor9.

Estamos en el camino de la unión con él, y como escribió Thomas Merton: “No importa cuán distraído estés… continúa centrando tu corazón en Dios… Su presencia no depende de tu pensamiento en él. Él está infaliblemente allí”10. En este viaje descubriremos que él y nosotros estuvimos allí juntos todo el tiempo y la separación no estaba en nuestro destino.

No mas preguntas de: “¿Ya hemos llegado?”.


  1. https://www.brainyquote.com/quotes/quotes/m/martinbube133855.html
  2. Sweet Sorrows: Selected Poems of Sheikh Farideddin Attar Neyshaboori, Renditions by Vraje Abramian, p. 91
  3. Daniel Matt, The Essential Kabbalah: The Heart of Jewish Mysticism (San Francisco: Harper Collins, 1995), p. 127
  4. Yoga and the Bible, p. 2
  5. Sefat Emet, Rabbi Yehuda Aryeh Leib of Ger, in Estelle Frankel, The Wisdom of Not Knowing (Boulder: Shambhala, 2017), p.26
  6. Thomas Merton, Spiritual Direction and Meditation (Collegeville, MN:Liturgical Press), p. 67
  7. Maharaj Charan Singh, Luz sobre San Mateo, p. 86
  8. Maharaj Sawan Singh, Joyas espirituales, # 158
  9. Maharaj Charan Singh, En busca de la luz, #451
  10. Thomas Merton, New Seeds of Contemplation (New York: New Directions Publishing), p. 224