Cartas espirituales
Como miríadas de colores en un segundo
Él se muestra ante ti:
unas veces es todo amor y compasión,
otras con dura indiferencia.
Abre tu ojo interno,
abrázale interiormente,
ahí, donde nunca deja de estar a tu lado.
Sarmad, Martyr to Love Divine
El bhajan es una actividad tal que desapega inmediatamente la predisposición del corazón hacia las actividades y deseos inferiores, y lo apega al verdadero Shabad para que obtenga la paz en él. La razón del aumento de pensamientos mundanos es que al pasar todo el día trabajando (…) la atención se concentra en esas actividades y los pensamientos asociados con ellas se enraízan en la mente. Durante la meditación, esos pensamientos aparecen inevitablemente en la conciencia, mientras la atención se concentra en un solo punto. Sin embargo, de manera similar, a medida que tu meditación aumente progresivamente, el surat se volverá tan constante al concentrarse en el Shabad que se mantendrá allí todo el tiempo. Así que a medida que la duración de tu meditación vaya aumentando, empezará a producir dulzura. Entonces esta queja sobre los pensamientos mundanos también se resolverá. En resumen, cuando le dediques a esta práctica, dos, tres o cuatro horas diarias, dentro de un mes o dos, tú mismo comprobarás su resultado.
Cartas espirituales, 1 (de Seth Pratap Singh Ji - del Soami Bagh, Agra)
Adviértele a tu mente que sus acciones no siguen las instrucciones del satgurú. Todo lo que se hace siguiendo las instrucciones del satgurú es trabajo del satgurú y de naturaleza espiritual. Por muy poco que sea, representará mucho.
Te pongo un ejemplo para que lo comprendas: si se siembra un campo con semillas después de arar y regar a su debido tiempo, cada grano de esa semilla se multiplica hasta convertirse en un puñado. En algunos tallos de trigo incluso brotan sesenta o setenta racimos, es decir, espigas de trigo, de un solo grano. A veces un único grano se convierte en un kilo de granos. Sin embargo, si se siembran granos de semillas similares en una tierra estéril, se pierde incluso la propia semilla. Así que todo lo que hace la mente –las dudas que plantea, los argumentos que presenta, las malas acciones que comete, y los placeres sensuales a los que se entrega–, es como sembrar una semilla en tierra estéril. Nunca debemos desear tales cosas mundanas, hijo mío. Más bien debemos permanecer siempre en la voluntad del satgurú.
Cartas espirituales, carta 49
El bhajan y el simran son nuestro verdadero trabajo, hijo mío. Esto siempre permanecerá con nosotros, ya que es el regalo del satgurú. Ese don crecerá, y no disminuirá nunca. Cualquier otro honor, incluso la morada de los dioses o el paraíso, será irreal. Está sujeto a la destrucción y también a crearse de nuevo. Así que obtenerlo o no obtenerlo es lo mismo, porque un honor que primero se da y luego se quita, no tiene ningún valor. Pero así es como suceden los acontecimientos del mundo. Entonces, ¿qué valor tiene una posición elevada? Si se recibe, está bien, y si no, todavía mejor. No hay por qué lamentarse. Por su gracia y misericordia, el Señor mismo te ha mostrado el camino a su verdadero hogar. (…). Así que ahora trabaja para alcanzarlo y mantente firme en tu amor y devoción. Ten una fe firme en que un día, en este mismo cuerpo, él te llevará a su verdadero hogar. Escucha el sonido del Shabad-dhun con amor y devoción, y con la atracción de la mente superior enfoca el surat y el nirat en él. Eliminando los deseos de la mente burda, escucha el Shabad-dhun todos los días.
Te pido que, por favor, hagas tu bhajan y simran todos los días. Fija tu amor en el Shabad-dhun y escúchalo con amor y devoción, porque escuchándolo repetidamente te volverás puro. Las actividades mundanas siguen su curso según los karmas pasados: a medida que los karmas se manifiestan, se resuelven por sí mismos. Así que no les temas; a veces son buenos, y a veces malos. No deberías preocuparte por ellos; tu preocupación debe ser la meditación.
Ten siempre presente que todo es un sueño. No te emociones con las actividades mundanas; mantén la mente desapegada, y recuerda las instrucciones del satgurú. Todo el trabajo del mundo es tan irreal como un sueño, y seguirá siéndolo. Conecta la mente y las facultades del surat y el nirat, con amor y devoción, al sonido del Shabad-dhun. Elimina cualquier preocupación sobre el trabajo mundano. Cuando medites, hazlo con una mente desapegada, como en un sueño, donde no eres consciente de ningún asunto del mundo.
Cartas espirituales, carta 147