Ninguno de tus compañeros…
En verdad, ninguno de tus compañeros te es solidario,
estás rodeado de malhechores
y te encuentras profundamente dormido.
Despierta al amor de la compañía de los santos
y deja que el maestro te tiña de un color
que está más allá de todos los colores:
el de la pureza del Nam.Propiedades y riquezas no te ayudarán,
pues de un solo golpe tendrás que dejarlo todo atrás.
Por delante hallarás una noche oscura y profunda,
así que esfuérzate por alcanzar el objetivo
mientras aún es de día.
Desperdiciada esta ocasión,
te será difícil volver a conseguir este cuerpo
y te perderás en el desierto de la transmigración.Entrégate al maestro y complácelo con tu servicio;
¡vamos, amigo mío!, adopta esta forma de vida.
Solo el maestro es verdaderamente tuyo,
conserva este pensamiento firmemente en tu mente.
¡Amigo mío!, no te enredes en la red de este mundo,
permanece absorto noche y día en la meditación.
Sigue el consejo del gurú
y vive en el mundo con un sentimiento de desapego.(…) Mantén la mente en el simran, sirve al maestro
y elévate hoy hacia el cielo…
Soami Ji. Sar Bachan. Bachan 15, shabad 5